En que es diferente el lenguaje de los estudiantes de hoy a los de hace 10 años.

Lamentablemente el lenguaje estudiantil se ha ido degradando al paso de los años al grado de quedar con un mísero vocabulario de 350 palabras.
Esto es verdaderamente preocupante puesto que en la década de los 80´s el vocabulario de un alumno promedio constaba de 1000 palabras lo que significa que en 20 años el lenguaje se ha reducido más del 50% y se plantea que en los próximos años se reduzca aun más.

La problemática más grande de este tema, es la estrecha relación que existe entre el pensamiento y las palabras o vocabulario, debido a que el hombre piensa con palabras y gracias a eso puede diferenciar unas realidades de otras.

Aunque, cabe aclarar que gran parte de este problema esta justamente en los estudiantes que no se esfuerzan por aprender y mejorar como personas.

se debe en parte a las largas horas frente a un televisor o computadora como lo señala la Lic. Mirta Susana Mendizábal, titular del Colegio de Fonoaudiólogos Regional Bahía Blanca En parte por la televisión y las computadoras, el lenguaje se está restringiendo y va variando. Los adolescentes ahora utilizan normalmente 350 palabras cuando un niño, a los 4 años, tiene incorporadas en condiciones normales alrededor de 2.500 palabras", sostuvo. --Algunos especialistas sostienen que el lenguaje de los adolescentes se reduce a 200 palabras y que gira en torno a pocos vocablos clave como: loco, cabrón y obvio, por ejemplo
Como lo se dice en este documento Web:
http://www.lanueva.com/edicion_impresa/nota/nc/30/03/2008/83u136.html

Como todos sabemos hace algunos años se inicio una moda que se ha se extendido hasta nuestros días referente a la lengua, esta “jerga” juvenil donde llamamos igual a todos nuestros amigos y conocidos, me refiero al famosísimo güey ó Wey , lo que ha propiciado que nuestro vocabulario se reduzca considerablemente.

Donde quedaron aquellos años, donde los estudiantes utilizaban palabras como amigo, compañero, hermano y más sinónimos; en vez de comprimirlos y sustituirlos en simple “cuate” o de plano “WEY”.


Es evidente la decadencia y los problemas que este estancamiento cultural acarrea a nuestros futuros profesionistas; como lo refleja el estudio hecho en chile que se puede leer aquí:http://groups.google.com.mx/group/chile.soc.politica/browse_thread/thread/3ed908158453e92f/163dca65ca07e50b?hl=es&lnk=st&q=diferencias+entre+el+lenguaje+de+los+estudiantes+actuales+y+los+de+hace+10+a%C3%B1os#163dca65ca07e50b; que nos dice que en el año 2000 , los resultados de la prueba Simce (Sistema de Medición de la Calidad de la Educación) mostraron que un 63 % de los alumnos no cumplía con los objetivos mínimos, en matemática, y un 50 %, en lenguaje. Más tarde fue la revelación del mal rendimiento de 15.000 alumnos de séptimos y octavos de 187 establecimientos, en el TIMSS (Third International Mathematics and Science School), es atroz la devaluación de nuestra lengua, como dice el académico Lázaro Carreter: "Millares de mañosos y chapuceros están maltratando el lenguaje. Basta leer con atención gran parte de lo que se escribe al público: aunque en una ojeada parezca sano, fijando la mirada se advierte que, en grandes zonas, el tejido está fofo, exangüe y agusanado".
http://www.cem.itesm.mx/dacs/publicaciones/logos/anteriores/n43/mcalvo.html

Este problema se puede combatir con lectura y algo de ganas de aprender.

Por: José Armando Hernández de Lira.